La costumbre está tan involucrada en nuestra vida diara, que ya ni nos percatamos de ella. Cuando pasa algo que no esperamos es cuando nos sacudimos un poco y vemos cosas que habíamos olvidado que estan ahí y que son importantes.
Esta semana fui parte de eso al igual que todos. Pero hice algo para cambiarlo.
Falleció la mamá de un amigo, fui a comprarle unas flores. Y a los dos días, regresando del trabajo iba manejando y pensé: "Es un poco irónico que le haya comprado flores a la mamá de un amigo que ya murió y a la cual nunca conocí, y a mi mamá no le haya comprado nada últimamente." En ese momento me orillé, y me bajé a comprar 3 flores: para mi mamá, mi hermana y mi tía.
No quiero que las personas que amo se conviertan en una costumbre en mi vida diaria.